Nufonia Must Fall de Kid Koala: Amor del bueno, amor de robot
Corría el año 2014 cuando Eric San, conocido como Kid Koala, Dj canadiense reconocido mundialmente en la escena del scrach y las tornamesas, y novelista gráfico se reunió con el nominado al Oscar K.K. Barrett– el diseñador de producción conocido por su trabajo en filmes de Sofía Coppola como Perdidos en Tokio y María Antonieta, y Spike Jonze en ¿Quieres ser John Malkovich? y Her–, para llevar a los escenarios una historia que nació en 2003 llamada Nufonia Must Fall.
La propuesta es la primera novela gráfica del Dj, y cuenta la historia de un robot al borde de la obsolescencia que se enamora de una experta en robótica e intenta conquistar su corazón con canciones de amor, pero que no sabe cómo cantar.
“Creo que partes de la historia son autobiográficas, y se establece en un tiempo futuro donde los robots están en todas partes, pero Nufonia es básicamente una buena historia de amor a la antigua”, indicó San. El montaje, se presentará en el marco del Festival Santiago a Mil 2017 del 10 al 12 de enero en el CA660 Itaú Corpbanca.
Desde que se estrenó en Toronto, Canadá, las funciones se han agotado rápidamente y no es para menos, ya que la novela gráfica, que contiene 300 páginas, se transforma en un espectáculo de marionetas, con filmación en tiempo real y música en vivo.
Cada una de las escenas de Nufonia Must Fall, que fueron escogidas por San, son representadas por más de 40 marionetas que habitan 17 pequeñas cajas, las que son filmadas en directo y cuya acción es seguida por el público a través de una pantalla gigante. Es un espectáculo multidisciplinario que encandila por su originalidad, ya que al mismo tiempo el Dj toca piano y pincha discos, acompañado de un Cuarteto Afiara.
Para la puesta en escena se necesitan 15 personas de manera simultánea, que incluye actores, titiriteros, músicos, operadores y técnicos de cámara. “Siempre digo que el show en vivo es una experiencia bastante emocionante porque se puede ver la “película” en vivo en la pantalla grande, pero en cualquier momento se puede bajar la mirada hacia el escenario y ver en directo todo lo que están haciendo los artistas”, adelantó Kid Koala.
“Se siente como si los 15 fuésemos en una tabla de surf. En cada momento, estamos tratando de equilibrar el tiempo, la música, las marionetas y el movimiento de la cámara”, contó San de 42 años, quien vive en Montreal con su esposa y dos hijas.
Lápiz y discos
¿Qué fue primero: la música o el dibujo? “Probablemente fueron las dos al mismo tiempo”, indicó Eric San, quien desde que tiene cuatro años de edad comenzó a tener clases de piano, y solía dibujar una gran cantidad de aviones y autos. De hecho, su madre aún los guarda.
Su primer recuerdo sobre un comic fueron los libros de cuento que les regalaron sus padres, ambos de origen chino . “Se podía escuchar la historia, la música y pasar las páginas, leer el texto y ver las imágenes. Podría escapar en ese pequeño universo durante horas”, recordó.
Cuando tenía 12 años descubrió la música y desde ese momento no paró más. Hoy tiene cuatro discos bajo el brazo, llena clubs, bares y grandes recintos. Ha trabajado con Radiohead, los Beastie Boys, Arcade Fire, Money Mark, A Tribe Called Quest, Mike Patton, DJ Shadow, y La Banda de Jazz Preservation Hall. Sin mencionar que ha colaborado con Gorillaz, The Slew y Deltron 3030, con quienes se presenta de manera frecuente.
En paralelo a todos los proyectos recién mencionados creó su segunda novela gráfica Space Cadet, que junto a Nufonia Must Fall tienen como protagonista a robots, ¿por qué esto? Porque “amo los robots. Siempre me ha gustado dibujarlos desde que era un niño. ¡Pueden ser sorprendentemente caracteres emotivos también!”, exclamó.
El montaje que veremos en Santiago a Mil, es carente de diálogos, otro de los sellos del artista, ya que creció en un entorno en donde se veían un montón de películas de Charlie Chaplin, “me encanta la forma en que fue capaz de contar historias universales principalmente a través de la acción”, finalizó.