Delfina Guzmán se aventura en nueva obra en el Teatro Municipal de Las Condes
Delfina Guzmán se aventura en nueva obra en el Teatro Municipal de Las Condes
Las alas de Delfina, montaje creado y dirigido por su hijo Gonzalo Meza, podría ser el último trabajo teatral de la actriz de 88 años. Se presentará en el recinto capitalino el 12, 13 y 14 de mayo, para luego llegar al Teatro Regional del Maule y al Centro Cultural de Alto Hospicio en Iquique.
La historia suena familiar: una actriz famosa, ya octogenaria, comienza a ensayar su última obra de teatro. Ese es el personaje que la querida Delfina Guzmán interpretará el 12, 13 y 14 de mayo cuando presente Las Alas de Delfina, un montaje creado y dirigido por su hijo Gonzalo Meza.
Aunque suene sorpresivo, el papel estuvo pensado originalmente para otra actriz. “Nunca planeé que fuese Delfina, aunque el argumento, que era y sigue siendo más o menos el mismo, está inspirado en su vida”, confesó el director en una entrevista a La Tercera. Fuese por eso o no, la historia no fue suficiente para que la actriz de 88 años se convenciera de volver a la actuación, luego de estar casi retirada de la profesión.
¿Cómo lo lograron? Transformándolo en un proyecto en el que estuviera involucrada la familia, además de ex-estudiantes de Teatro Imagen, la compañía creada por Gustavo Meza, ex marido de Delfina. Así, de la mano de su nieta Javiera Eyzaguirre, quien está a cargo de la iluminación, y de su hijo Juan Cristóbal Meza, que compuso la música para el montaje; fue posible crear una sencilla, pero íntima ambientación. En ella, se ve a la artista retirada trabajando en el proceso de memorización del texto, en el cual comenzará a encontrarse con ella misma cuando era una joven actriz principiante. La emotiva situación servirá como excusa para ir descubriendo pasajes desconocidos de la vida de la misma Delfina.
Pero a pesar de lo cercana que resulta la historia, el trabajo no ha sido fácil para la actriz de 88 años, especialmente por la cantidad de ensayos y por seguir desafiando la capacidad de su memoria. “Ha sido difícil volver al ejercicio de aprender los textos, pues siempre estuve acostumbrada a actuar en obras realistas, pero esta tiene una narración fragmentada, muy compleja”, explicó Delfina en la misma entrevista. Pero para salir adelante y estar en forma, tomó algunas decisiones: realizar sesiones en la cámara hiperbárica y tomar 14 vitaminas cada mañana, según contó a Revista Cosas.
Desde el anuncio de Las alas de Delfina, el montaje ha captado la atención del público porque podría ser “el último de su carrera”. “Que esto sea visto como un adiós me da mucha risa, porque me metieron al ataúd antes de tiempo”, bromeó en un artículo en El Mercurio, mientras que en La Tercera dejó algunas dudas: “Sí podría ser uno de mis últimos montajes, es cierto, ya estoy vieja y mi memoria cada día es más frágil, pero nadie podría asegurarlo. Varias veces me preguntaron cómo me gustaría morir, como si a uno le gustara pensar en la idea de morirse, y siempre dije que de pie, sobre un escenario, actuando”, agregó.
Aún así, Delfina está preparada para las primeras tres funciones en el Teatro Municipal de Las Condes (todas a las 20 horas), como también para las que vendrán: Las alas de Delfina llegará el 20 de mayo al Teatro Regional del Maule, en Talca, y el 27 y 28 al Centro Cultural de Alto Hospicio en Iquique. Quién sabe a dónde más llegará.